LA COCINERA DE SANKT PAULI

No es fácil cocinar en un barco pirata
ni consolar las penas de Reeperhbam
Hay restos de almas ingratas
En los puestos Del Fischmarckt
Doménica, Doménica…
Cupido se confiesa en Herbertstraße
Y embarca en el ferry a su puta,
También Colón creyó que Cuba era un continente
Descendientes del corsario Störtebeker
Seguimos bajando por
el ascensor que cuelga del Elba
Fickin und lecken
el Guante Dorado dicen que nunca cierra
Klaus, Gaba y Juan
Saborean el último cóctel de lenguas
Klaus, Gaba y Juan
Saborean el último cóctel de lenguas
Otro cadáver en el Neweesbar
La cocinera de Sankt Pauli
Sale detenida por la puerta de atrás
Demasiada cocaína, pero, ¿de quién eran las balas?
Doménica, Doménica…